Realmente, es impresionante percatarse de la gran cantidad de detalles presentes en el proceso de escogencia de un abogado, sea éste de lesiones personales o no. Es por ello que, en aras de intentar abarcar la complejidad del asunto, decidimos elaborar una serie de artículos explicativos, de tal manera que, todo aquel que necesite un abogado, reconozca la importancia y los pormenores que acaecen a la búsqueda de uno en particular.
En los artículos previos (véase I y II), hablamos sobre la primera etapa del proceso de selección de un abogado de lesiones personales: la etapa de indagación o investigación. Explicamos, detalladamente, qué debe tomarse en cuenta en esa etapa, incluyendo una serie de consejos o tips para maximizar la eficiencia en la búsqueda.
Pues bien, si ya has culminado esa etapa y has seguido al pie de la letra las instrucciones que dimos, entonces deberías tener una lista de, aproximadamente, 10 candidatos. Este número de candidatos, cabe aclarar, es un resultado natural de la etapa de indagación, así que puede variar en función de la manera en que hayas llevado a cabo de esa etapa. Sin embargo, es recomendable que el número de candidatos no sea mayor a 10, para que no tengas problemas de tiempo en el proceso de selección de tu futuro abogado de lesiones personales.
Una vez que tienes tus 10 candidatos, prosigue la etapa de conocerlos personalmente.
Prepara una reunión individual con tus candidatos
Evidentemente, la contratación de un abogado de lesiones personales no puede realizarse sin antes haber preparado una reunión individual con tus candidatos. En otras palabras, no es recomendable que adquieras los servicios de un profesional jurídico basándote sólo en información on-line u off-line o llamadas telefónicas o recomendaciones personales. Es necesario que tú personalmente te reúnas con tus candidatos. Tal como dijimos en una de los post anteriores: la lógica y la racionalidad son esenciales, pero no puede obviarse la importancia del componente subjetivo.
Sin embargo, ¡no te apresures! Antes de comenzar los preparativos de las reuniones personales con tus aspirantes, debes prepararte tú mismo. Para ello, es fundamental que elabores una lista con las preguntas que le harás a cada uno de los candidatos.
Lista de preguntas
- ¿De qué manera se aplica el estatuto de limitaciones en mi caso?
- ¿En qué te especializas? ¿Tus conocimientos jurídicos están más enfocados hacia qué área?
- Este caso como el mío… ¿Es el primero que tomas o te has encargado de muchos casos similares? De ser la segunda opción, ¿me podrías indicar, con exactitud, el número de casos similares que has asumido; ¿o, en su defecto, me podrías señalar un aproximado de esa cantidad? Asimismo, continuando con la asunción de que tienes experiencia en este tipo de litigios, ¿serías tan amable de indicarme cuál ha sido el resultado de esos casos que han estado bajo tu responsabilidad?
- ¿Trabajas individualmente o de manera conjunta? De ser la segunda, ¿cuántas personas adicionales estarán atendiendo mi caso? ¿Y podrías decirme quiénes serán?
- De acuerdo a tus conocimientos en el área y en función de tu experiencia (de haberla), ¿cuál consideras que será el tiempo de duración de este caso? ¿Cuánto crees que tomará su resolución?
- ¿Cuál será el costo y de qué manera será efectuado? ¿Ud. trabaja con honorarios o trabaja por horarios? Si es la primera, ¿cuál será la comisión? ¿Cuál será el porcentaje que asumirá? Si es la segunda, ¿cuánto cobra por hora?
- ¿Ud. me notificará la evolución de mi caso? ¿Con qué frecuencia Ud. me enviará reportes sobre la dirección de mi litigio? ¿Y de qué forma hará la notificación o el envío de esos reportes?
- En apego a su experiencia con casos cuyas características son iguales o similares que las del mío, ¿podría indicarme cuál es su propensión a ir hacia la corte? Es decir, ¿con qué frecuencia Ud. lleva estos casos a un tribunal?
- En algún momento de su carrera, ¿Ud. ha sido sujeto a alguna clase de suspensión? ¿Ha recibido alguna amonestación? ¿Se le ha acusado de violar algún precepto del código de ética que rige su profesión? ¿Algún State bar le ha sancionado?
- Si Ud. es miembro de alguna firma, ¿podría decirme si esa firma está relacionada con alguna compañía de seguros? ¿Uds., en plural, poseen alguna conexión con aseguradoras? ¿O, por el contrario, Uds. gozan de independencia con respecto a estas empresas?
- Con respecto a la dirección del caso, ¿Ud. lo conducirá considerando únicamente sus propios criterios; ¿o, por el contrario, Ud. escuchará y consultará con su cliente? ¿Hará caso de mis deseos e intereses o los omitirá y sólo actuará sólo con base en su criterio personal?
- Por último, quisiera conocer su opinión personal de mi litigio. ¿Cuál es su percepción? ¿Cuánta confianza puede depositar en mi caso? ¿Cree que es bueno? ¿Tendrá alguna resolución satisfactoria?
Por supuesto, éstas no son las únicas preguntas que les puedes hacer a tus aspirantes; puedes omitir algunas, escoger las que te parezcan más adecuadas, así como también puedes agregar otras de tu preferencia personal.
La importancia de estas preguntas se sitúa en la información que puede obtenerse a partir de las respuestas de los candidatos; información, sobra decir, que puede resultar muy útil para lograr la selección correcta de tu abogado de lesiones personales. Adicionalmente, estas preguntas te pueden ayudar a determinar el grado de comodidad que puedes sentir con tu futuro representante legal.
Información y documentación del caso
Ten en cuenta que tú no serás el único que hará preguntas, sino que tus propios candidatos formularán sus interrogantes. Una reunión personal con tus aspirantes supone una consulta inicial, así que ellos intentarán conseguir toda la información posible de tu caso. Es por ello que, otra de las cosas que deberías hacer antes de preparar un encuentro con los abogados es levantar la mayor cantidad de datos posibles de tu litigio: haz preguntas a tus testigos, consulta con otros profesionales, entre otras cosas. Estos datos deben ser registrados para ser posteriormente presentados a tus candidatos.
Sin embargo, es necesario apuntar lo siguiente: un error muy frecuente durante este proceso de recolección de información es omitir o excluir datos, con la creencia de que son irrelevantes o que no tienen mucha importancia. Esa creencia es peligrosa y debe desaparecer: toda información del caso es relevante, así como el más mínimo detalle, así que no tengas mesura en cuanto a la extensión de los datos recabados.
Asimismo, sería excelente que pudieras conseguir documentos relativos a tu asunto legal. La documentación es esencial no sólo para que tu futuro abogado pueda informarse adecuadamente del caso, sino también para que se pueda llevar a cabo una resolución satisfactoria. Los documentos pueden fungir como pruebas o evidencia, lo cual duplica su relevancia en los procesos legales.
Resumir los datos principales de un reclamo de lesiones personales no es una tarea fácil porque la cantidad de información, así como sus características y relevancia pueden variar en función de cada reclamo. Sin embargo, es posible apuntar algunos datos “universalmente importantes”, esto es, que siempre tienen relevancia independientemente de las particularidades de los casos. Aquí algunos de ellos:
- Documentación médica: Los registros médicos constituyen, con toda certeza, la información más primordial. Asegúrate, entonces, de recabar facturas (gastos del tratamiento a corto y mediano plazo); diagnósticos que certifiquen la gravedad y la naturaleza de las lesiones; pruebas o test médicos que complementen a los diagnósticos; y cualquier otra información médica.
- Documentación policial: También es importante tener a la mano documentos referidos a los arrestos de las partes involucradas, donde aparezcan todos los detalles concernientes a ellos. Asimismo, consigue registros de citaciones emitidas.
- Documentación profesional: La opinión de expertos en el área es tomada muy en cuenta, tanto por tu futuro abogado de lesiones personales, como por el juez en un tribunal. Es por ello que es aconsejable que recabes documentos en los que se refleje el criterio de profesionales; por ejemplo, opiniones sobre la reconstrucción del sitio donde ocurrió el accidente.
- Documentación fotográfica: Si bien puede ser manipulado y usado a conveniencia, el registro fotográfico es una de las mejores herramientas para reconstruir lo sucedido. Si tú no tomaste fotos del accidente, existe la posibilidad de que otras personas (testigos) lo hayan hecho. En plena era de la información, es prácticamente imposible que un hecho de gran impacto, como un accidente, no sea fotografiado.
- Documentación testimonial: Como complemento al resto de las demás documentaciones, los testimonios de diversos testigos del accidente son claves para que tus candidatos puedan conocer con exactitud la verdad de los hechos y, de esta manera, preparar tu defensa, determinar las probabilidades de victoria, posicionar el caso a tu favor, entre otras cosas. Así pues, no te olvides de los testigos y tómales su declaración de lo acontecido.